El teletrabajo es una fórmula que ha ganado mucha popularidad especialmente después de la pandemia. Para muchos expertos, puede ser la solución decisiva a la conciliación entre familia, trabajo y vida de ocio, pero para que este objetivo sea posible, es importante diseñar bien unas rutinas donde haya hueco para todas las necesidades vitales.
Si además se da la circunstancia de que hay un bebé en casa, la situación se complica, porque los cuidados que este requiere son mayores que en hijos de edad más avanzada, cuando ya pueden ir al colegio o adquirir algunas responsabilidades.
Sacar adelante el trabajo con niños pequeños en casa, especialmente cuando son bebés, puede convertirse en una tarea muy compleja. Las interrupciones se vuelven constantes y con ellas los despistes, la desconcentración y la sensación de no estar ni a una cosa ni a otra, ni en el trabajo ni en el cuidado del bebé. Por ello, estas recomendaciones pueden ser de gran utilidad.
A pesar de que trabajar desde casa ofrece más libertad de horarios, lo ideal es establecerse un calendario y un horario que vayan acostumbrando al organismo a esas rutinas. El horario lo puedes ajustar al tiempo en el que el bebé está durmiendo, que pueden ser los tramos de mayor productividad en la faceta laboral.
El horario de una mamá que teletrabaja debe ser ordenado, pero no muy estricto. Es decir, hay que dejar flexibilidad y saber gestionar cada tarea con algo de margen. La planificación ha de ser realista y comprender que van a producirse situaciones en las que hay que dejar a un lado el trabajo y cumplir con otros cometidos, como jugar con el bebé o realzar tareas domésticas.
A su vez, si tanto la mamá como el papá trabajan en casa, es conveniente fijar turnos para el cuidado de los peques que se adapten bien a la carga de trabajo de cada progenitor.
Los hijos pequeños, hasta los tres años, tienen un horario muy marcado de comidas, descanso y sueño. Los momentos en los que los bebés estén durmiendo hay que aprovecharlos para hacer otras tareas, incluso para descansar. Y cuando estén activos, diseñar actividades o circuitos que hagan que se cansen un poco más para así sacar partido del tiempo en el que ellos están descansando.
Si los hijos ya son un poco más mayores, pasan de bebés a niños con capacidad de comprensión, hay que explicarles que mamá trabaja en casa, que no siempre pueden estar demandando su atención.
Implicar a los niños y que ellos vayan aprendiendo buenas pautas de comportamiento también resulta útil para su propia autoestima y desarrollo como personas.
El teletrabajo es una fórmula laboral que ha llegado para quedarse, pero que no siempre es fácil de implementar en casa, especialmente cuando hay niños pequeños a los que cuidar. Estos consejos te pueden resultar de gran ayuda para lograr tus objetivos.
La crianza consciente es una forma de ser y conectar con tus hijos en el día a día. Es una filosofía de vida que invita a los padres a ser más intencionales, a escuchar y acompañar a sus hijos desde la empatía y la comprensión. En lugar de imponer normas de manera autoritaria, se busca guiar a los niños a través del ejemplo, la escucha activa y la validación de sus emociones.
Crear una rutina para bañar a tu bebé es una oportunidad para crear un vínculo emocional y sensorial que puede fortalecer vuestro vínculo afectivo.
