La psicomotricidad es la relación entre la actividad psíquica y la función motriz del cuerpo. Resulta asombroso ver los progresos que se producen día a día en los bebés, y serán especialmente significativos si se les estimula correctamente.
Cada bebé tiene su ritmo de aprendizaje, pero suele haber una secuencia general: el descubrimiento de sus manos, la manipulación de objetos, la coordinación entre manos y ojos, movimientos cada vez más precisos, etc. Las actividades adecuadas a su desarrollo siempre son importantes.
Actividades para favorecer la psicomotricidad en bebés
Siempre celebramos estos hitos de desarrollo, a la par que nos invade la nostalgia al comprobar lo rápido que pasa el tiempo. Como adultos de referencia positiva, es importante que nos involucremos por dos motivos: disfrutar de su crecimiento y promoverlo de un modo saludable.
¿Qué actividades se pueden en marcha para potenciar el desarrollo de la psicomotricidad en bebés? Veamos algunos ejemplos.
Manta de actividades para bebé con piano
La manta de actividades es un producto muy completo porque tiene diferentes colores, texturas y formas. Y, en este caso, también variedad de sonidos gracias al piano, lo que estimulará su sentido del oído, de la vista y del tacto.
Desde los tres meses, el bebé podrá pasar horas mirando los llamativos objetos de su alrededor, intentando agarrarlos o golpeándolos. Se puede colocar bocarriba o bocabajo y, cuando pueda hacerlo, también sentado.
Andador
El andador es un producto con el que se divierten especialmente, y que además ayuda a ejercitar los músculos de las piernas, favorece su equilibrio y les permite ganar autonomía. Si en la bandeja exterior incluye objetos con diferentes formas, colores y sonidos, mucho mejor.
Hay modelos completos con dos funciones, la de balancín y andador, y que además tienen asientos giratorios para mayor autonomía.
Hamaca con arco de juegos
Cuando el bebé aún es muy pequeño no podrá interaccionar con los objetos usando sus manitas, ni tampoco incorporarse para quedarse sentado solo. Pero va desarrollando el sentido de la vista y el del oído.
En los primeros meses, son muy útiles los arcos de juegos o los móviles de cuna. Están suspendidos, luego se mueven con el aire o el roce y llaman su atención. Además de estimular, también ayuda a que se tranquilicen cuando mamá o papá no los llevan en brazos.
Son solo tres ejemplos de juegos que se pueden utilizar para favorecer la psicomotricidad en bebés, pues hay muchas otras actividades: sonajeros, mordedores, cuentos de tela, cubos apilables, puzles, cochecitos… Se trata de buscar uno adaptado a su edad y animarles a que los usen ajustándonos a su ritmo de aprendizaje.